Por todas estas cuestiones, el complejo El Chocón-Cerros Colorados fue calificado por muchos como «la obra del siglo», comenzándose su construcción en el año 1968, entrando en servicio la primera turbina en 1972 y concluyéndose la construcción, con sus seis turbinas, en 1977.
Pero Hidronor era mucho más que la obra por la cual se hizo famosa, habiendo construido además las centrales hidroeléctricas de Planicie Banderitas, Arroyito, Alicurá, Piedra del Águila, Pichi Picún Leufu, así como los sistemas de transmisión correspondientes y las ampliaciones posteriores que optimizaron el aprovechamiento de la energía.
En resumen y para tener una idea del potencial de generación que poseía la empresa, solo el complejo El Chocón tiene una capacidad instalada de más de 1300 MW, generando un promedio de 3600 GW\h y aportando de esta manera el 5% de la capacidad del Sistema Interconectado Nacional actual y aportando en conjunto con sus otros complejos, más del 27% de la energía de este sistema en el año 1990.
Lamentablemente, esta empresa correría la misma suerte de tantas otras, siendo privatizada en el año 1993 y generándose de esta manera la perdida para el Estado una de las principales herramientas que poseía para mantener nuestra Soberanía Energética.
Deseo aportar mi experiencia desde adentro de Hidronor S.A., por cierto una gran empresa nacional, eficiente en sus obras, sin atrasos, dentro de presupuesto y con excelente calidad. No fue simplemente privatizada, sino desmantelada por el gobierno de Menem. Si bien todas sus unidades de generación y maniobra fueron entregadas en concesión, el corazón de la empresa, que eran sus cuerpos técnicos de obra y proyectos fue eliminado.
Gracias por su aporte estimado Jorge.