En el marco del primer Plan Quinquenal (1947 – 1952), se crea la Fabrica Argentina de Locomotoras, con sede en los talleres de Liniers (ex FFCC Oeste).
Al frente de esta fabrica, Perón designa a alguien que ‘la historia’ se dedicó posteriormente a borrar, el Ingeniero Pedro Saccaggio. Este inventor de renombre internacional tenía entre sus inventos la modernización de los sistemas de iluminación y calefacción en base a energía eléctrica (antes la calefacción se abastecía del vapor de la locomotora), desarrollos varios en material tractivo (que se siguen empleando hoy en día en todo el mundo) e incluso la fabricación en 1929 de una Usina Móvil, construida en los talleres de Remedios de Escalada. Este último invento es un concepto distinto de la posterior locomotora diesel, ya que se trata de una usina que alimenta de energía a los motores eléctricos ubicados en todos los coches, mientras que la locomotora diesel tracciona coches y vagones sin motor. Demás esta decir que estos adelantos, desarrollados en el país desde 1925 fueron vastamente reproducidos en el exterior (principalmente en Inglaterra), pero su fabricación en nuestro país fue poco menos que vedada por los ferrocarriles extranjeros.
Pero el caso que nos ocupa en lo referente a FADEL es la construcción de las primeras Locomotoras Diesel en el país. Con su propio «Proyecto Saccaggio» como precursor, el Ingeniero desarrolló un modelo del cual se llegaron a construir dos unidades, la «Justicialista» y la «Argentina», destacándose por su bien funcionamiento, su bajo costo operativo y su autonomía (record) de 2000 Km. sin ningún tipo de reabastecimiento, debido a sus tanques de combustible que podían contener hasta 8000 litros de gas oil, 3000 litros de agua y 350 litros de aceite lubricante.
En el verano de 1952/3 la CM1 cubrió el corredor Constitución-Mar del Plata, corriendo «El Marplatense», recorriendo 400 kilómetros en 3 hs. 45 min. con un total mensual de 20.000 kilómetros. Con los mismos buenos resultados hizo viajes a Bariloche en 22 hs. 10 min. y a Mendoza en 11 hs. 40 min., alcanzando una velocidad promedio de 145 a 150 kilómetros horarios.
En marzo de 1953 la CM1 alcanzó los 100.000 kilómetros de recorrido y el Ing. Saccaggio presentó un informe al Ministro de Transporte Ing. Maggi: recorría 850 kilómetros diarios, para la misma prestación se necesitaban tres locomotoras a vapor de primera línea. Se resaltaba el desgaste mínimo tanto de las llantas de la Locomotora como de los rieles. Estos resultados avalaban la posibilidad de continuar la producción hasta construir 610 locomotoras.Debido al éxito de los prototipos, se encargo la construcción de 70 locomotoras más, pero el Ingeniero Saccaggio propuso un modelo mejorado y se encargo la construcción de 610 nuevas locomotoras, para las cuales se construyo la División de Grandes Motores Diesel de Fiat en Córdoba (hoy Materfer).
Finalmente, en 1955 el país sufre el golpe de la «Revolución Libertadora», que desmantelo FADEL y se encargo de desprestigiar al Ingeniero Saccaggio ante la opinión pública al poner en duda su idoneidad diciendo que era «un ex lavacopas del FFCC Oeste que pretendía fabricar locomotoras en el país».
Como ultimo dato, el Ing. Saccaggio se defendió de estas acusaciones publicando una solicitada en «La Nación», haciendo referencia a su carrera, su pertenencia a asociaciones internacionales de ingenieros y sus proyectos, solicitada que el diario ubico en su sección deportiva…
El proximo 24 de Agosto realizaremos una charla en la filial 127 del Banco Credicoop de Bahia Blanca . En » Una historia de la industria Nacional » , rescataremos , dentro de nuestras posibilidades , la figura de Don Pedro Saccaggio .Injustamente maltratado por la prensa hegemonica y ocultado por la historia oficial. Desde ya estan invitados . Saludos
A mis 73 años y con 32 de ferroviario y, como tantos otros argentinos de mi edad, hijo, nieto, sobrino de ferroviarios, me siento conmovido y entristecido por el daño tremendo que se le hizo a todos los argentinos, sin distinción de color partidario ya que nos perjudicaron a TODOS los argentinos quienes, conduciendo circunstancialmente las «riendas» del país destruyeron el mejor, más económico, menos contaminante, más productivo, más Etc. sistema de transporte conocido hasta la fecha. Esto en un amplio rango de distancias y geografías. No tiene competencia para el transporte de cargas cualquiera sea el parámetro elegido para comparar, salvo en cortas distancias. Seguridad (costo de los seguros), contaminación (un tren completo de cargas = 40 camiones), velocidad (aún en nuestro sistema casi sin evolución desde la nacionalización en 1948, tenía velocidades promedio de 120 Km/h, y permitidos de hasta 160 Km/h), productividad (en temporada, llegaron a correr desde el Alto Valle, 18 trenes diarios de 40 vagones!. Hoy se tira la fruta por no poder hacer frente a los costos de transporte).
Nuestro país poseía una planta de soldadura de rieles La Plata) realizando tramos de 216 mtrs. y cambios de alta velocidad. (También había uno similar aunque de menores dimensiones y que no llegó a operar pleno, ubicado en Los Naranjos, aledaño a La Banda, Santiago del Estero). Llegaron a operar 22 talleres de reparaciones de locomotoras, coches y vagones, con una alta capacidad de mano de obra altamente capacitada. En talleres Rosario del actual FFCC Mitre, hoy convertido en Carrefour, se DISEÑABAN LOCOMOTORAS que después se fabricaban en Inglaterra para el resto del mundo. Se llegó a poseer una red de cerca de 44.000 km de extensión y grandes proyectos para ampliarla a las necesidades de un país tan extenso como el nuestro.
Cuando se destruyó la excusa de Neustadt era que el costo operativo (Él le llamaba el déficit) rondaba el millón de dólares diarios y cuatro gremios ferroviarios con 103 mil agentes. En Francia estaba cerca de los nueve millones diarios y diecinueve gremios! y cerca de 400 mil agentes. En Japón el costo operativo estaba en los cuatro y medio millones y 200 mil agentes. Y así podría seguir.
Con respecto a los trenes chinos recientemente adquiridos tengo mucho, mucho para decir, en especial referido a las normas, tipo de alimentación, costos, Etc.
Como creo aburrir con el tema no voy a abundar. Sólo digo que distintos presidentes y, en especial, el asesino final que fue algo así como «un chimpancé con navaja» (por favor, si hay cualquier parecido con la realidad no tuve intención) completó que consistió en la destrucción de nuestro sistema ferroviario
Hola, mi nombre es Facundo Picabea, soy investigador del CONICET, escribí libros sobre el Rastrojero y la Moto Puma disponibles en librerías comerciales de Buenos Aires y el interior del país. Me gustó mucho el posteo y les escribo porque en este momento estoy iniciando una investigación sobre la Fábrica de Locomotoras FadeL. A todo el que posea información o documentos al respecto le agradezco se ponga en contacto al mail: fpicabea@conicet.gov.ar.
Como mencioné, se trata de una investigación académica en el marco de un proyecto en la Universidad Nacional de Quilmes.
Muchas gracias.
soy nieto e hijo de ferroviarios y es demasiado el daño que causaron con el ferrocarril (destruyéndolo como hicieron) es mi opinión .
El proximo 24 de Agosto realizaremos una charla en la filial 127 del Banco Credicoop de Bahia Blanca . En » Una historia de la industria Nacional » , rescataremos , dentro de nuestras posibilidades , la figura de Don Pedro Saccaggio .Injustamente maltratado por la prensa hegemonica y ocultado por la historia oficial. Desde ya estan invitados . Saludos
A mis 73 años y con 32 de ferroviario y, como tantos otros argentinos de mi edad, hijo, nieto, sobrino de ferroviarios, me siento conmovido y entristecido por el daño tremendo que se le hizo a todos los argentinos, sin distinción de color partidario ya que nos perjudicaron a TODOS los argentinos quienes, conduciendo circunstancialmente las «riendas» del país destruyeron el mejor, más económico, menos contaminante, más productivo, más Etc. sistema de transporte conocido hasta la fecha. Esto en un amplio rango de distancias y geografías. No tiene competencia para el transporte de cargas cualquiera sea el parámetro elegido para comparar, salvo en cortas distancias. Seguridad (costo de los seguros), contaminación (un tren completo de cargas = 40 camiones), velocidad (aún en nuestro sistema casi sin evolución desde la nacionalización en 1948, tenía velocidades promedio de 120 Km/h, y permitidos de hasta 160 Km/h), productividad (en temporada, llegaron a correr desde el Alto Valle, 18 trenes diarios de 40 vagones!. Hoy se tira la fruta por no poder hacer frente a los costos de transporte).
Nuestro país poseía una planta de soldadura de rieles La Plata) realizando tramos de 216 mtrs. y cambios de alta velocidad. (También había uno similar aunque de menores dimensiones y que no llegó a operar pleno, ubicado en Los Naranjos, aledaño a La Banda, Santiago del Estero). Llegaron a operar 22 talleres de reparaciones de locomotoras, coches y vagones, con una alta capacidad de mano de obra altamente capacitada. En talleres Rosario del actual FFCC Mitre, hoy convertido en Carrefour, se DISEÑABAN LOCOMOTORAS que después se fabricaban en Inglaterra para el resto del mundo. Se llegó a poseer una red de cerca de 44.000 km de extensión y grandes proyectos para ampliarla a las necesidades de un país tan extenso como el nuestro.
Cuando se destruyó la excusa de Neustadt era que el costo operativo (Él le llamaba el déficit) rondaba el millón de dólares diarios y cuatro gremios ferroviarios con 103 mil agentes. En Francia estaba cerca de los nueve millones diarios y diecinueve gremios! y cerca de 400 mil agentes. En Japón el costo operativo estaba en los cuatro y medio millones y 200 mil agentes. Y así podría seguir.
Con respecto a los trenes chinos recientemente adquiridos tengo mucho, mucho para decir, en especial referido a las normas, tipo de alimentación, costos, Etc.
Como creo aburrir con el tema no voy a abundar. Sólo digo que distintos presidentes y, en especial, el asesino final que fue algo así como «un chimpancé con navaja» (por favor, si hay cualquier parecido con la realidad no tuve intención) completó que consistió en la destrucción de nuestro sistema ferroviario
Hola, mi nombre es Facundo Picabea, soy investigador del CONICET, escribí libros sobre el Rastrojero y la Moto Puma disponibles en librerías comerciales de Buenos Aires y el interior del país. Me gustó mucho el posteo y les escribo porque en este momento estoy iniciando una investigación sobre la Fábrica de Locomotoras FadeL. A todo el que posea información o documentos al respecto le agradezco se ponga en contacto al mail: fpicabea@conicet.gov.ar.
Como mencioné, se trata de una investigación académica en el marco de un proyecto en la Universidad Nacional de Quilmes.
Muchas gracias.
Juan Facundo, sería para mi um gusto y honor que me puedas enviar tus investigaciones y tb la de F.A. de L.
Gracias